Siempre va bien recordarse lo beneficioso que es meditar. La noticia de los 12 niños que han sido rescatados de una cueva en Tailandia es un buen recordatorio de ello. Estos niños sobrevivieron a dos semanas en condiciones muy difíciles, sin comida ni apenas aire que respirar, gracias a las técnicas de meditación que les enseñó su entrenador.
Si la meditación puede ayudarnos a mantener la calma y superar circunstancias de vida o muerte, ¿cómo puede ayudarnos con nuestras dificultades del día a día?
Gracias por hacerlo tan fácil y animar a la práctica con tanta alegría.
Pensaba que no meditaba nunca, pero escuchándote acabo de ser consciente de que medito muchas más veces de las que creía y más habitualmente de lo que pudiera pensar. Relacionando las sensaciones y emociones del antes y después, la conexión conmigo, la paz que sientes, eso me hizo darme cuenta de que medito en la guagua, fregando la loza, tendiendo la ropa, paseando por la playa, observando un árbol o una planta…
Vamos, que no hay excusa para no hacerlo porque tenemos 16 horas de vigilia al día para poder practicarlo.
Gracias.